Sentirse nervioso antes de una entrevista laboral es casi inevitable, especialmente, considerando el difícil contexto laboral actual en el que miles de candidatos pueden llegar a postularse para un único puesto de trabajo.
La entrevista, en muchas ocasiones, es la única oportunidad del aspirante para demostrar su valía frente a la persona que le entrevista y solemos tener poco tiempo para demostrar a la empresa si somos lo que anda buscando.
Normalmente nos asusta no estar a la altura ante preguntas difíciles de las que no tenemos respuesta, o quizá que los nervios nos jueguen una mala pasada y nos impidan responder con contundencia. Sin embargo, lo que un candidato no suele esperar son preguntas raras o completamente descontextualizadas.
Brian Milligan, redactor de BBC Mundo, asegura en un artículo lleno de ejemplos que el gran número de candidatos que se presentan hoy a una misma oferta de empleo hace que las entrevistas de trabajo empiecen a diferenciarse. Los cazatalentos de las grandes empresas ya no se conforman con las preguntas tipo y en los departamentos de Recursos Humanos se cuecen preguntas que jamás imaginaría un candidato…