La falta de sueño constante, las horas robadas a la noche que luego nunca se recuperan, acaban por pasar factura en la salud. Es el síndrome de la privación de sueño, tan necesario para limpiar el cerebro que los médicos asimilan cada vez sus efectos a los que tiene la malnutrición sobre los músculos. Por eso una compañía estadounidense ha roto los esquemas y se ha propuesto asegurarse de que sus …