No es un secreto que la creatividad se ha convertido en una de las principales cualidades que buscan las empresas al momento de reclutar talento. De hecho en un estudio realizado por Steelcase se descubrió que el 72% de la fuerza laboral actual considera que ésta habilidad será la clave para el desarrollo futuro.
El ritmo de trabajo que llevamos, el cual exige respuestas rápidas a los problemas que se presentan, puede llegar a causar bloqueos mentales, afectándonos al momento de estar buscando una solución, y generar estrategias o planes de trabajo.
Sin embargo, existen algunos trucos que podemos seguir para activar nuestra mente, logrando de este modo, evitar que estos bloqueos se conviertan en un obstáculo para nuestro desempeño.
Son técnicas muy sencillas, que no ocupan mucho tiempo y que aplicadas en el momento adecuado, pueden ayudar a elevar la concentración de los colaboradores y por tanto, su productividad.
Ser creativo permite observar un problema desde diversas perspectivas para encontrar mejores soluciones.
Durante mi experiencia al frente de equipos intergeneracionales, he podido observar que la flexibilidad para con nuestros empleados es un factor determinante para asentar su identidad como parte de la cultura de la organización.
Las siguientes ideas pueden funcionar como herramientas para crear un ambiente laboral en el que todos se sientan física, emocional y cognitivamente felices y capaces de desarrollar sus actividades de cada día.
Puede sonar poco ortodoxo, pero herramientas como los bloques de plástico o la plastilina para crear una figura pueden ayudar a activar al cerebro antes de entrar a una lluvia de ideas o crear un plan de trabajo.
Tan sólo es necesario preguntarnos: ¿qué más puedo hacer con esto? ¿De qué otra forma puedo usarlo o ajustarlo? Ayuda a empujar la exploración al tiempo que fomenta nuevas maneras de pensar cuando se trata de un proyecto difícil o que representa un reto.
Visualizar las actividades que estamos desarrollando y plasmarlo en ideas o palabras clave sobre papel, estimula al cerebro para crear una forma más clara de ver las cosas, cuando nos sentimos atorados o bloqueados.
Está comprobado, de acuerdo con datos de Northwestern University, que tomarse un “break de risas” aumenta la capacidad de resolver problemas en un 20%, permitiendo que nuestro cerebro asocie nuevas ideas.
Fomentar estas acciones debe estar acompañado de la creación de espacios y momentos que impulsen el bienestar de la empresa y todos los que la conforman, de tal manera que ayuden a formar un ambiente favorable para impulsar la creatividad y sobre todo, sentirnos a gusto con nuestros empleos.
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