El límite parece ser bastante sutil para diferenciar a los que aman lo que hacen y a quienes simplemente son adictos al trabajo. En un artículo de EXAME, el coach Alexandre Rangel, socio de Alliance Coaching, dice que para él la diferencia está en que amar el trabajo frecuentemente produce el famoso «estado de flow», que consiste en un estado mental en que el profesional se siente completamente …