Los datos de paro registrado de julio tienen un sabor agridulce. El desempleo desciende en 64.886 personas pero la afiliación a la Seguridad Social crece sólo la mitad de esa cifra (en 32.890 personas). De este modo, los registros del antiguo INEM cuentan con menos parados, un hecho que no es directamente proporcional al aumento de personas dadas de alta en la Seguridad Social.
La razón, los expertos la encuentran en el desánimo de los parados a seguir inscritos (o apuntarse por primera vez en las oficinas de Empleo), después de meses o incluso años sin ser citados ni para una entrevista de trabajo. Además, recuerdan la salida de muchos parados españoles del país en busca de empleo en el extranjero.
Otro aspecto que desinfla el optimismo del dato del paro registrado de julio es el que resulta de eliminar el efecto calendario. En términos desestacionalizados, sin contar con el tradicional descenso del desempleo en julio por las contrataciones veraniegas, en realidad el paro no sólo no bajó, sino que creció el mes pasado en 7.591 personas respecto al mismo dato desestacionalizado de junio…
