Aunque todavía es pronto para sacar conclusiones sobre el efecto de la última reforma laboral, en una encuesta realizada a 300 empresas por expertos del sector, desvela que tres de cada cuatro empresas, han adoptado por medidas que afectan a las condiciones laborales del trabajador. Casi un 70% de estas compañías han optado por reducir salarios. Los expertos pronostican que se tardará diez años en recuperar los puestos de trabajo perdidos durante la crisis.
Después de diez meses con la última Reforma Laboral en vigor, los expertos se aventuran a sacar algunas conclusiones. La más importante es que las medidas de flexibilización interna de la empresas que ha introducido la nueva ley están dando resultados, según Jesús Mercader, director del Instituto de Relaciones Laborales -una de las instituciones que han elaborado el primer observatorio de la Reforma Laboral con más de 300 encuestas a empresas-. Casi tres de cada cuatro compañías han modificado las condiciones laborales de sus plantillas para evitar despidos.
Mercader destaca que lo más habitual ha sido que las empresas que han realizado despidos, o tienen previsto hacerlo, combinan los ajustes cuantitativos, como suspensiones o reducciones de jornada, con medidas más cualitativas. En concreto, los afirma el 35% de los encuestados. Entre las cualitativas, la más frecuente ha sido tocar los salarios. Una de las medidas más polémicas de la actual normativa es permitir el descuelgue de convenio por parte de las empresas por causas económicas. Casi el 70% de las empresas que toman está decisión lo hacen para bajar salarios. El porcentaje es similar cuando, del 64%, en los casos que se modifican las condiciones del contrato. Iñigo Sagardoy, vicepresidente de la Fundación Sagardoy, afirma que las empresas «están usando la reforma laboral en un momento crítico para evitar que haya despidos. Antes de que entrara en vigor era imposible utilizar estas medidas».
Otra muestra para Sagardoy de las posibilidades que ofrece la reforma laboral para esquivar la destrucción de empleo es el aumento de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo. «Las empresas empresas están acudiendo a medidas mixtas no sólo a la extinción del puesto de trabajo». Los ERE’s sin despidos se ha elevado del 48% sobre el total de expedientes de 2008 al 60% actual.
Aunque los expertos advierten que es pronto para sacar conclusiones, sirve para ver tendencias en el futuro. Uno de los principales objetivos de la reforma es reducir los costes laborales. En este sentido, el estudio aprecia un ligero desde descenso de los gastos por despidos. La mitad de las empresas han afirmado haber abonado indemnizaciones entre 20 días y 33 días por año trabajado, tal como recoge la actual normativa. Un 25% afirma haber pagado más de 45 días por encima del máximo previsto antes de la reforma laboral.
La encuesta también abarca previsiones para los próximos meses. El 37% de las empresas creen que realizaran despidos por motivos económicos en el próximo trimestre, frente al 46% que no se lo plantea. Francisco Mesonero, director de Responsabilidad Corporativa de Adecco, cree que la ocupación no volverá a niveles previos de la crisis hasta dentro de diez años, teniendo en cuenta el tope de creación de empleo se situó en 400.000 puestos de trabajo cuando la economía Española crecía al 3%.