Primero, empecemos con qué NO hay que preguntar en una entrevista de trabajo. El principal paso en falso que usted puede dar es preguntar: «¿Qué hace su empresa?». Si no ha hecho los deberes e investigado la compañía, no merece sentarse a la mesa.
Pero asumamos que ha hecho su tarea. La mejor forma de enfrentarse a la entrevista es pensar en ella como en una primera cita. Aunque una entrevista de trabajo tiene lugar en un entorno profesional y los resultados son distintos, las intenciones son las mismas. Ha intercambiado información porque piensa que podría haber una conexión, y ahora está listo para averiguar si quiere que las cosas vayan más allá.
Como en una primera cita exitosa, tendría que haber un buen equilibrio. Ninguna persona debería dominar la conversación y hacer todas las preguntas. Aunque el empleador le preguntará sobre su experiencia y objetivos, usted debería hacer preguntas que le ayuden a entender por qué debería comprometerse con ese trabajo.
Además, las preguntas son una muy buena manera de mostrar que usted entiende los objetivos y desafíos de la empresa, de subrayar sus cualificaciones y ética del trabajo, y, más importante, dar una impresión que le coloque en lo alto de la lista de candidatos potenciales.
A continuación, diez preguntas que le aportarán una perspectiva de la compañía a la vez que producen una impresión favorable.
1. Me han dicho que trabajo bien en equipo. ¿Cuáles son algunas de las formas con las que su empresa alienta el trabajo en equipo?
2. La satisfacción a largo plazo en el trabajo es importante para mí. ¿La empresa está comprometida con cultivar el talento desde dentro, siempre que sea posible?…