La tasa de empleo de España se situó al cierre de 2012 en el 59,3%, diez puntos por debajo de la existente en 2007 y la segunda cifra más baja de toda la UE, según datos difundidos este martes por el Instituto de Estudios Económicos (IEE). Desde el comienzo de la crisis, las tasas de empleo se han reducido en casi todos los países europeos con diferente intensidad, salvo en los casos de Alemania, Austria, Luxemburgo, Polonia y Malta, que a pesar de las dificultades económicas han logrado incrementar su tasa de empleo.
De hecho, Alemania situó su tasa de empleo en 2012 en el 76,7%, logrando colocarse junto a Suecia (79,4%) y Países Bajos (77,2%) entre los países de cabeza. Austria, por su parte, ha elevado su tasa de empleo algo más de un punto desde 2007, hasta el 75,6%, mientras que la de Polonia se ha incrementado cuatro puntos y la de Malta, casi cinco, hasta el 64,7% y del 63,1%, respectivamente.
España, Irlanda y Grecia son los países que han experimentado los mayores recortes en su tasa de empleo desde el estallido de la crisis. Grecia, el país con la tasa más baja, la ha reducido casi once puntos, hasta el 55,3%, mientras que Irlanda y España han experimentado descensos de 10 puntos, con tasas del 63,7% y del 59,3%, respectivamente.
Con tasas superiores al 70% se sitúan Suecia, Países Bajos, Alemania, Austria, Dinamarca, Reino Unido, Finlandia, Estonia, República Checa, Luxemburgo y Chipre, mientras que en la banda del 60% al 70% se encuentran el resto de países de la UE, a excepción de España y Grecia, que están por debajo del 60%.