La historia de las grandes corporaciones de Internet nos es contada como si fuera un cuento de hadas, sin conflictos laborales ni maniobras empresariales. Pero no es así.
Cuando a principios de 2005 la demanda de ingenieros e informáticos comenzó a crecer en Silicon Valley, Steve Jobs, selló en nombre de Apple un pacto secreto e ilegal con Eric Schmidt, CEO de Google, para mantener bajos los…