Más del 70% de los trabajadores en el mundo no tienen acceso a un seguro de desempleo ni a ningún otro tipo de prestación si pierden su empleo, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
«La reciente crisis económica mundial ha servido para resaltar la importancia del seguro de desempleo», señaló el organismo en un comunicado, en el que añadió que de los 198 países analizados, sólo 72 ofrecen algún tipo de protección al trabajador sin empleo.
Con respecto a los seguros de desempleo, la OIT aseguró que el porcentaje de parados desprotegidos es aún mayor, porque si se incluye a los trabajadores que no han contribuido al sistema de Seguridad Social el tiempo suficiente, hay más de un 86% de desempleados que no pueden acceder a las salvaguardas.
«Esto significa que más del 86% de los 40 millones de personas que abandonaron el mercado laboral desde 2008 se encontraron repentinamente sin un ingreso regular», declaró la experta en protección social de la OIT, Florence Bonnet.
Los jóvenes son los más afectados Por otro lado, el organismo insistió en que los jóvenes están especialmente afectados por este problema porque si pierden el empleo poco después de ingresar en el mercado laboral, «es posible que no hayan cotizado la seguridad social el tiempo suficiente para tener derecho a las prestaciones por desempleo».
En este sentido, la OIT agregó que sólo 16 de los países analizados ofrecen seguro de desempleo para los jóvenes desempleados en busca de su primer trabajo.
El organismo estableció además diferencias entre las distintas regiones en cuanto a la protección contra el desempleo, que puede ser muy alta en Europa Occidental, América del Norte, Europa Central y Europa Oriental âdonde la cobertura del seguro de desempleo alcanza el 80%â, mientras que en África puede ser inferior al 10%.
Esta cobertura es inferior al 40% en América Latina y el Caribe, y está por debajo del 20% en Oriente Medio y Asia.
Garantizar las prestaciones
Bonnet manifestó que muchos países de ingresos medios han comprendido la necesidad de introducir sistemas de protección contra el desempleo a fin de facilitar las transiciones económicas estructurales y responder a las crisis.
«Los países con protección del desempleo y otros mecanismos similares, idealmente asociados con políticas activas del mercado laboral, han sido capaces de reaccionar a la crisis con mayor rapidez y de manera más eficaz que otros países que no tienen estos estabilizadores automáticos», dijo Bonnet.
La experta agregó que estas prestaciones de desempleo facilitaron la búsqueda de empleo, a la vez que contribuyeron a que la mayoría de los trabajadores y empleadores se adaptaran a la repentina disminución de la demanda garantizando los ingresos y manteniendo los niveles de consumo.
La OIT citó como ejemplo a países como Alemania o Australia, que facilitaron la recuperación económica a través de la combinación de sistemas de seguro social y asistencia social.