En un intento por frenar la propagación de COVID-19/Coronavirus, cada vez más empresas a nivel mundial están implementando entre sus colaboradores la modalidad de trabajo remoto. Y aunque muchas de ellas han recurrido anteriormente al teletrabajo, es probable que otras compañías estén instaurando este sistema por primera vez y aún no son conscientes de los riesgos de seguridad a los que podrían exponerse si no concientizan a sus empleados ni fortalecen sus sistemas de seguridad informática.
Una vez que notebooks, smartphones o tabletas se llevan fuera de la infraestructura de red de una empresa y se conectan a nuevas redes y WIFI, los riesgos de seguridad se amplían y aumentan. Según un estudio desarrollado por Kaspersky en conjunto con la consultora de estudios de mercado CORPA, el 28% de los trabajadores chilenos no cuenta con un computador portátil destinado únicamente para trabajar y, si lo tiene, uno de cada diez lo conecta a una red pública de Wi-Fi (cafés, restaurantes y aeropuertos) cuando está fuera de la oficina. En tanto, solo el 8% asegura que se conecta a una red virtual privada (VPN) mientras se encuentra en terreno.
El mismo sondeo evidenció que el 38% de los empleados chilenos responde a una política corporativa de seguridad que resguarda el uso de celulares o computadores móviles, y el 62% restante no se rige por ninguna o desconoce si su lugar de trabajo tiene alguna implementada.
“El coronavirus no solo está poniendo en jaque la salud de las personas ya que también está siendo utilizado como cebo por los ciberdelincuentes para propagar malware. Además de un aumento en el trabajo remoto para proteger la salud de los trabajadores, hemos visto cómo delincuentes informáticos intentan aprovechar el interés que ha causado el virus, ocultando archivos maliciosos en documentos que supuestamente se relacionan con la enfermedad, por lo que a medida que las personas continúen preocupadas sobre el brote, es posible que veamos más y más malware oculto en archivos falsos que contienen una variedad de amenazas, desde troyanos hasta gusanos que son capaces de destruir, bloquear, modificar o copiar datos, así como interferir en el correcto funcionamiento de las computadoras”, explica Dmitry Bestuzhev, director del Equipo de Investigación y Análisis para América Latina en Kaspersky.
Por ello, añade el especialista, es primordial que las compañías insten a los colaboradores que por esos días que están trabajando desde sus casas, a ser cautos y precavidos, y reexaminen sus sistemas de seguridad y de acceso remoto a redes corporativas.
“Las empresas deben comunicarse con sus trabajadores y explicarles claramente los riesgos a los que se exponen tanto ellos como la organización si no se toman los resguardos correspondientes al momento de conectarse a internet, como, por ejemplo, si hacen clic en enlaces sospechosos o abren correos de remitentes desconocidos”, recalca Bestuzhev.
Con el fin de que las organizaciones reduzcan los riesgos de ciberataques asociados al trabajo remoto, Kaspersky aconseja lo siguiente: