A pesar de los avances en igualdad, la casa y el cuidado de los hijos siguen siendo cosa de mujeres. Ellas son las que soportan en sus espaldas la mayor parte de las tareas domésticas, mientras que ellos se dedican más a su trabajo. La dificultad que todavía hoy existe para conciliar empuja a la mujer a renunciar a ascensos (el 35%), a dejar de trabajar para cuidar de sus hijos (el 30%) o a cambiar de empleo para lograr un mejor horario (23,8%).
Son algunos datos del estudio Diversidad familiar y estrategias de conciliación en Andalucía realizado por la Universidad de Sevilla en colaboración con el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) y que fue presentado ayer por la consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz.
El informe, realizado entre 164 familias andaluzas en 2011, analiza casi por primera vez los diferentes tipos de familias. En las heteroparentales (formadas por hombre y mujer), aunque se han dado pasos importantes hacia la igualdad, las mujeres continúan asumiendo la mayor parte de las tareas del hogar y se encargan de los hijos. Por ejemplo, el 90% de las entrevistadas es la que lava los platos habitualmente y el 91,5 pone la lavadora…