Las transiciones en los altos cargos de las compañías se parecen mucho a la política, al menos en la forma en que los observadores, asesores y especialistas reaccionan a ellas.
Por un lado, suele haber una cháchara interminable sobre si la persona que obtuvo el empleo es la correcta y existe una tendencia a la crítica apresurada. ¡Si tan sólo fulano de tal hubiera obtenido el puesto! ¿Es María …