La retribución de los trabajos va en proporción inversa (por regla general) al esfuerzo físico que conllevan. Se pueden establecer tres escalones retributivos que son razonables, cobrar por hacer, cobrar por saber y cobrar por ser, hasta que se dan casos como el que ilustra el vídeo que encabeza el post, que son los que ponen en duda que las cosas deban ser así.
Cobrar por hacer …