En muchos casos, el primer trabajo suele ser una anécdota dentro del currículum, especialmente ahora que es tan común cambiarse de una empresa a otra, emprender un negocio o incluso cambiar el rumbo drásticamente y reinventarse el futuro laboral.
Pero según el multimillonario Jack Ma, fundador de la empresa china Alibaba, tu primer trabajo es fundamental, incluso aunque no sea muy inspirador.
Eso dijo mientras participaba en una de las conferencias realizadas en el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza.
“Tu primer trabajo es el más importante”, dijo Ma frente a la audiencia.
Eso no quiere decir que se trate de tu “trabajo soñado” o que sea un empleo que realmente disfrutas.
Pero la clave es que el primer trabajo sea una experiencia donde puedas realmente aprender de otros y formarte a ti mismo.
Incluso aunque no se trate de una empresa con gran prestigio, “debes encontrar un buen jefe que te enseñe cómo ser un buen ser humano, cómo hacer las cosas bien”, agregó.
Con el paso del tiempo, ese tipo de aprendizaje te permitirá descubrir tus debilidades y fortalezas y saber hasta dónde quieres llegar.
Hablándole a los jóvenes, Ma les recomendó que se hagan una promesa: “Me quedaré tres años” y entonces llegará el momento para buscar otro lugar donde desarrollarse.
“He visto muchos desastres”
Ma comentó que ha visto a muchos jóvenes renunciando precipitadamente a sus empleos, sin dejar el tiempo suficiente para conocerlos a fondo y asentarse.
El proceso de inmersión puede tomar tiempo y es necesario enfrentar los desafíos que se presentan sin dar un portazo antes de tiempo.
“He visto muchos desastres”, dijo Ma.
Ma fue profesor de inglés durante 20 años.
“Una de las razones por las que sobreviví durante 20 años, fue mi trabajo como profesor”, agregó.
Ma comenzó su carrera como profesor de inglés en Hangzhou, China, antes de ponerse de acuerdo con un grupo de emprendedores y fundar hacia fines de los 90 la empresa que terminaría convirtiéndose en una de las más valiosas compañías del mundo.
Su trabajo como docente, cuenta el empresario, le ayudó a identificar a la gente talentosa y a motivarlos para salir adelante.
“Cuando contrato gente, contrato a las personas que son más inteligentes que yo“, apuntó Ma.
“Personas que cuatro o cinco años después podrían llegar a ser mis jefes”.
Leer completo en La Opinion
Leer más sobre Jovenes y Empleo