La globalización, la competencia, todo apunta a una mayor flexibilidad laboral, por parte del empleador y del empleado. Por lo que cambiar frecuentemente de empleo es una situación cada vez más normal…
La cultura organizacional es uno de los pilares más importante al interior de las empresas. Sin embargo, muchas no le dan la debida atención, a pesar de que con algunas mejoras podrían tener resultados mucho más positivos en sus estados financieros al fin de cada periodo. De acuerdo a Ivette
Llegar a la oficina todos los días en el mismo horario, sentarte en tu escritorio (tuyo, con tus fotos y tus cosas), cumplir una jornada de 8 o 9 horas y usar la computadora corporativa o -con suerte- también un celular si tu compañía así lo decide. ¿Te suena familiar
El presidente mundial de Starbucks, Howard Schultz, ofrece sus consejos a emprendedores y a personas que están a punto de convertirse en presidentes de compañías…
Tu capacidad para comunicarte, negociar o empatizar con tus compañeros⦠Las habilidades sociales cada vez son más valoradas por las compañías y resultan esenciales para lograr el éxito profesional…
Por Kellogg Insight. El temible mal jefe viene en muchas variedades. Están los incompetentes, los perezosos, los que siempre están a la defensiva, los que usurpan la autoría de nuestro trabajo, los que prefieren ejercer el mando por medio de la intimidación. Jon Maner, profesor de gestión y organizaciones en la Kellogg
¿Celos en la oficina? No necesariamente es algo malo si sabe cómo abordarlos correctamente…
En la empresa actual se lucha constantemente en mantener el equilibrio entre la polivalencia y la especialización. La primera reduce el número de personas que son imprescindibles y aumenta el rendimiento. La especialización en cambio, mejora el producto y su valor agregado. «El problema es que no es tan fácil encontrar
Utilizar la gracia para ser más visible y conseguir una posición dentro de la organización no es una estrategia sostenible. Las bromas sin inteligencia y que no ayuden a conseguir resultados no valen…
El rechazo al trabajo no puede ser entendido como un mandato para las personas que piensan que producirían más y con un mejor estado de salud si trabajaran menos horas. La mayoría de nosotros no podemos darnos el lujo de repudiar el trabajo…